San Lorenzo y Huracán frente a frente, un clásico con dos necesidades
Alexis Cuello y Ramón “Wanchope” Ábila hablaron en conferencia de prensa en la previa del clásico en el Nuevo Gasómetro.
Por Valentín Suez
Alexis Cuello y Ramón “Wanchope” Ábila compartieron su mirada sobre el clásico en el Estadio Pedro Bidegain. El tono fue cordial, con ambos subrayando la trascendencia del duelo que pondrá frente a frente a San Lorenzo y Huracán, en un choque que puede marcar el rumbo del Clausura para los dos equipos.
Huracán llega golpeado tras la eliminación en la Copa Sudamericana y con la necesidad de reaccionar en el torneo local. Después de esa caída internacional, el Globo empató con Unión en Parque Patricios y todavía busca reencontrarse con la victoria para retomar confianza. “Estos son partidos diferentes, que se juegan con otra mentalidad. Para nosotros es muy importante ganarlo, más después de lo que pasó en la Sudamericana”, remarcó Ábila.
Cuello, en tanto, fue consultado por sus últimas tarjetas rojas, una por Copa Argentina y otra en el torneo local, y respondió con seguridad sobre cómo afrontará el clásico: “Estoy tranquilo. Yo voy a
seguir jugando al máximo”, declaró, descartando cualquier especulación sobre un cambio en su estilo de juego.
El experimentado Ábila también destacó la importancia anímica que tendría una victoria para el plantel: “Sería importante anímicamente ganar el sábado”, aseguró. Ambos coincidieron además en pedir que el encuentro se viva sin violencia y que la gente pueda disfrutar de un buen espectáculo.
San Lorenzo, por su parte, atraviesa un presente más favorable. El equipo cortó una racha adversa con un triunfo frente a Instituto y suma 11 puntos en la Zona B. De gana, alcanzará la cima del grupo. Huracán, en tanto, acumula 10 unidades y necesita imperiosamente un triunfo que lo impulse después de la frustración internacional y el empate de la última fecha.
El clásico en el Nuevo Gasómetro será con un marco que promete estar a la altura de la historia y la rivalidad. Un partido que se vive de manera especial y que, como resaltaron Cuello y Ábila, puede significar mucho más que tres puntos para ambos equipos.